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Tiempos de Comunicación 360

Tiempos de Comunicación 360

Según Wikipedia, la Comunicación Corporativa es «un conjunto de actividades implicadas en la gestión y la orquestación de todas las comunicaciones internas y externas con el objetivo de crear un punto de vista favorable entre las partes interesadas de las que depende la empresa «.

La definición es correcta, pero un punto normativa (incluso, escéptica). Y es que, en la práctica, la Comunicación de una empresa va mucho más allá de las comunicaciones que se establecen internamente y externamente y/o para proyectar una buena imagen.

La Comunicación es, hoy, un factor clave en la estrategia de negocio y desarrollo de cualquier empresa, grande y pequeña, porque la realidad está muy fragmentada y las marcas necesitan llegar a su público e impactar. Además, ¿de qué sirve tener el mejor producto del mercado, si no somos capaces de comunicarlo?

¿Para qué sirve la Comunicación Corporativa?

En el ámbito de la empresa, la Comunicación Corporativa sirve, principalmente, para conseguir tres grandes objetivos:

  1. Directamente, proyectar una imagen atractiva a los públicos (téngase en cuenta, sin embargo, que, como decía Oscar Wilde: «Hay solamente una cosa en el mundo peor que hablen de ti, y es que no habla de ti»).
  2. Indirectamente, satisfacer el orgullo de pertenencia de sus miembros y clientes (excepto el Sr. de Pepsi, ¿a quién no le gusta beber Coca-Cola? 😉)
  3. A largo plazo, mejorar las ventas y el objetivo de negocio (en efecto, no tendría mucho sentido invertir esfuerzos y dinero en Comunicación si, más allá de proyectar una buena imagen, no conseguimos aumentar los beneficios de la empresa).

Ante esto y en un contexto como el actual, en el que el proceso de comunicación clásico emisor-receptor se ha desdibujado y la transmisión de la información es mucho más amplia, desorganizada y no contrastada, las empresas, para comunicar bien, deben saber hacer Comunicación 360. Y esto significa, a grandes rasgos, tener en cuenta todos los canales de comunicación en que la empresa y su público están presentes y diseñar las acciones de comunicación de forma global y coordinada para todos ellos.

La Comunicación 360 también pide:

  • Dedicar tiempo suficiente al análisis previo, para ver cómo se ha comunicado la empresa hasta ahora, cómo es percibida por los públicos y cómo se comunican los competidores y otros referentes.
  • Considerar el público interno tanto o más que el externo; para fortalecer la identidad de la empresa y proyectar una imagen coincidente con la propia percepción, es necesario trabajar muy bien la comunicación interna.
  • Fijarse unos objetivos de comunicación claros y concretos, y para un tiempo determinado (ejemplo: aumentar el número de seguidores en LinkedIn en un 10% en 3 meses).
  • Evaluar los resultados de forma constante y rediseñar las acciones de comunicación para tratar de conseguir siempre el mejor resultado.

Igualmente, cuando hablamos de Comunicación 360, conviene recordar la vieja premisa de “menos es más” (atribuida al arquitecto alemán Mies Van der Rohe).

Es necesario reducir el número de acciones, posts y contenidos y dar paso al ‘tiempo’

Hace pocos días, el neurólogo Facundo Manes, hablando de su libro ‘Ser Humanos’, afirmaba en el El País que «En cinco años, ‘wasapear’ todo el día estará tan mal visto como fumar en un avión». Si bien nadie sabe a ciencia cierta qué usos tendrán en el futuro las redes sociales ni cuáles pervivirán para siempre, su estallido ha sacudido el panorama comunicativo en muchos niveles, y los nuevos tiempos comunicativos piden a las empresas consistencia. Las empresas necesitan comunicarse de forma consistente para llegar a su público, ser creíbles y ser recordadas, y esto muchas veces pasa por reducir el número de acciones, posts y contenidos y dar paso al tiempo. Porque, sin tiempo, no podemos pensar, ni entender, ni elegir.

¿Quieres preparar un Plan de comunicación 360 y no sabes cómo? En totoro comunicació podemos ayudarte. ¡Pregúntanos y te informaremos!