¿Por qué es, hoy, tan necesario causar una buena impresión?
Como decía Oscar Wilde, “no hay una segunda oportunidad para una primera buena impresión”. Las personas, ciertamente, quizás por mera condición humana, tendemos a juzgar de buenas a primeras todo lo que sucede a nuestro alrededor. La primera impresión que nos llevamos de un lugar,